Cartas de Mujeres. Jacinto Benavente. Publicada en 1893.
Una
gran y hermosa perla, un descubrimiento literario para mí, de este verano es:
Colección
Austral. Espasa-Calpe SA. (foto
de la edición Argentina). He leído la 8º edición, de 1959. Madrid
Llegó a mí por casualidad, digamos un “expurgo” de una bliblioteca donada
hace años…
Es una de las primeras obras de Jacinto Benavente. Por tanto, señalan su trayectoria y apuntan
su genio e intereses. Las cartas son geniales, perdón por repetirme. Parecen
costumbristas, de la clase alta de la sociedad, frívola, coqueta. Parecen “retratos”, mujeres de
diferentes estratos sociales con un común denominador: la lucha explosiva por
una quimera, el amor. Parecen; pero no sólo sólo eso. Son mujeres, hijas, nietas, hermanas,
esposas, amantes, princesas… Algunas cartas parecen profecías… de cambios
sociales…
Imágenes del pdf descargado, de 14-11-1912. Es la 2º colección. Tiene cartas a partir de
la XI de colección de Austral.
Os invito a leer el libro. Es de lectura a la vez
deliciosa, apasionante y que invita a la reflexión.
Jacinto Benavente hace protagonistas a las mujeres en
casi toda su obra, y desde las primeras publicaciones. Esto es muy importante
señalarlo, destacarlo en la cultura y literatura universales. Precisamente en
un escritor situado en el final del siglo XIX y hasta mediados del XX, periodo
en el que tantos sucesos ocurrieron en España: Independencia (“Perdida”) de
Cuba, una monarquía, dos dictaduras, una República…
Muchas cartas empiezan de una forma y terminan de otra. Me recuerdan un
poco a “Cinco horas con Mario” de Miguel Delibes (1966), solo que éste escribe
muchos años después.
Yo no había leído nada de Jacinto Benavente. Leer teatro no es mi pasión…
hasta ahora por lo menos.
Benavente tiene un gran dominio del lenguaje y de las
situaciones. Domina la sociedad de clase alta de su época. Sabe convertir escenas corrientes en narrativa atractiva. Sus diálogos son
afilados y llenos de ironía, que han llevado incluso a compararle con Oscar
Wilde.
Benavente puso un foco en la mujer, en las mujeres. Un foco de estudio, y un foco para iluminarlas y darles protagonismo.
Os dejo parte del Prólogo, fechado en mayo de 1893: Le
dedica todo el libro a las mujeres.
Refiere que Mantengazza, poeta, afirma la superioridad del talento epistolar de
las mujeres.
Hace un estudio histórico, y de la función
de las cartas. Va cargado de ironía por cómo escriben y para qué los hombres:
negocios, amor….
Refiere que no es una recopilación para
estudio social o psicológico, sino para componer un libro de entretenimiento.
Habla de cartas reunidas (parece un recurso literario, claro), de asunto y estilo
diferentes.
Las escogidas no son las mejores, si las
de más amena lectura y las que más agradable aspecto os presentan, más
favorecidas en término de retratista.
Derroche de poesía, de elocuencia…El papel
y el espejo son las dos superficies planas donde mejor se refleja el instinto
de prolongación del individuo hacia la humanidad.
Rara vez aciertan los hombres en sus
epístolas, los hombres escriben con la mira puesta en el público, en la posteridad,
en la historia.
¿Quién no ha tenido alguna vez pendiente
su vida entera de una carta?. En un paquete de cartas puede simbolizarse
nuestra existencia.
Conclusiones: Otra vez asomo por aquí,
lectoras de buena voluntad, para despedirme y daros la gracias, rendido. Se
describe como autor de comedias desdichado.
Jacinto Benavente en 1896, fotografiado por Franzen mientras
lee Gente conocida a la señorita Cobeña y al señor Thuillier (Blanco y Negro, 31 de octubre de 1896).
Os dejo algunas anotaciones de su biografía.
Jacinto
Benavente y Martínez (Madrid 12 de agosto de18-Galapagar 14 de julio de 1954).
Dramaturgo,
director, guionista y productor de cine español. Escritor. Autor y crítico
teatral. También cultivó la poesía, el cuento, crítica, periodismo.
Premio
Nobel de Literatura 1922.
Se le
considera el principal renovador del teatro español del cambio de siglo. Mejoró
la comedia de costumbres, de la época. Escribió más de 160 obras de teatro, abordando
casi todos los géneros teatrales, y en todos los ambientes. Realismo,
naturalidad y verosimilitud son los tres supuestos de su arte, sin excluir
cierto hálito de poesía o de exquisita ironía. Conoce todos los recursos
escénicos y sabe dar relieve dramático a las acciones más intrascendentes. Una
característica de su obra es el interés por la psicología femenina, que ha se
advierte en Cartas de mujeres. También escribió obras de teatro infantil, con
tono poético e ironía; El príncipe que
todo lo aprendió en los libros (1909)
o La novia de nieve (1934).
Hijo menor
del notable pediatra Mariano Benavente, fue el director del Hospital Niño Jesús
de Madrid, según algunos autores, primer pediatra español moderno. Inició los
estudios de derecho en la Universidad Central de Madrid; pero a la muerte de su
padre (1885) y gracias al desahogo económico que le brindó la herencia abandonó
para dedicarse a viajar y a la literatura.
No se casó. Se le considera homosexual; aunque nunca lo declarara públicamente.
En 1892
publica su primera obra, Teatro
fantástico; en 1983 publica un libro de poemas, Versos, otro de cuentos, Villanos,
y uno de crítica, Cartas de Mujeres.
El primer
estreno data de 1984, El nido ajeno,
que no tuvo éxito.
El éxito le
llegó con el nuevo siglo: La noche del sábado (1903), Rosas de otoño (1905) y
Los interés creados (1907) considerada su obra maestra.
Ingresó en
la RAE en 1912, y un escaño en el Congreso de los Diputados en 1918.
Premio
Nobel de Literatura en 1922.
Recibió
numerosos homenajes, durante la Monarquía-Dictadura de Primo de Rivera, durante
la República y durante el Régimen del General Franco. Premio Hijo Adoptivo de
Nueva York 81923). Premio Hijo Predilecto de Madrid (1924), Gran Cruz de
Alfonso X el Sabio (1924). Medalla al mérito del trabajo (1950), Medalla de Oro
de Madrid (1946).
Monumento
en el Parterre del Retiro, obra de Victor Macho, en 1962. En el parterre se
sitúa también un busto a Mariano Benavente, su padre, y a otro médico Pulido;
que tienen mucho que ver son la Pediatría. Ver la entrada de 2017:
Datos obtenidos de
diversas fuentes, y también de Jacinto Benavente en la Nube
La guía
incluye información sobre la vida y obra de Jacinto Benavente.
¡Ah!. Otro descubrimiento: una tesis
de una mujer, defendida en EE.UU. en 1963 sobre Jacinto Benavente. María Rosa de Arvizu. Aunque,
según mis datos, fue una mujer religiosa, (lo digo por el posible sesgo de su
pensamiento- ¿pero quién no tiene sesgos?) su lectura es deliciosa, magnífica,
muy reflexiva. La disfrutaréis.
Submitted to the graduate school of Loyola University
in partial fulfillment of the requirements for the degree of Master of Arts in
Spanish. Abril, 9, 1963. Chicago,
Illinois.
Maria Rosa de Arvizu Despujol (1919-2012) R.S.C.J. O sea: religiosa del
Sagrado Corazón de Jesús, falleció en Pamplona.
“ El libro se limita a
un sector de mujeres; a una clase; a una categoría (a las de la clase social de
Benavente). A las otras, a las mujeres de veras, no les copia las cartas.
Benavente. Quizá no tendría bastante tiempo para escribir, porque tenía muchos deberes
que cumplir, o quizá sus cartas no eran del tono literario superficial y de
"salón" que le interesaba al autor. El libro iba a gustar; tenía que
gustar; quizá eso explique parte de su contenido. Y sin duda ninguna, gustó. Y
mucho. Y las mujeres comentaban las cartas y se las sabían, algunas, de
memoria. Quizá sirvieron de enseñanza. Ya había dicho el autor en su prólogo,
que el libro, iba a tener "algún reflejo vuestro de verdad y
belleza," Y eso lo cumple, porque indudablemente los tiene. Quedémonos con
esto. El libro literariamente fino, agradable, perfecto, elegante, superficial,
presenta algunas facetas de la mujer, de algunas mujeres, por eso lo titula
Benavente "Cartas de mujeres."
…
Todas las mujeres que conocen la parte que
el autor les dio en su obra, guardan por él un profundo cariño y gratitud. No
acertó siempre, pero por lo menos trató de acercarse a la mujer, de descubrir
su misterio. Ésta no lo puede olvidar.
Tantos pensadores y tantas religiones han
denostado a la mujer, que resulta una sorpresa agradable encontrar algún autor
que la ensalza aunque a veces ponga en ello demasiada galantería.”
